La provincia norteña participa de Caminos y Sabores de la mano de 28 productores y artesanos. Un ejemplo de identidad con valor agregado.

Chica Salta

Agregar valor a las materias primas regionales y a los saberes de su gente es uno de los grandes desafíos de un país como el nuestro, con tanta diversidad cultural. La provincia de Salta muestra en Caminos y Sabores que hay todo un camino para recorrer en ese sentido.

En la feria que se realiza en La Rural hasta mañana participan 28 productores y artesanos de distintos rincones de la provincia de Salta. Los hay de Campo Quijano, San Antonio de los Cobres, Rosario de la Frontera, Cerrillos…  Pero en el camino de los artesanos es donde más se destacan.

Nicolás Ramos Mejía es Secretario de Industria, Comercio y Financiamiento del Ministerio de Ambiente y Producción de Sustentable de la provincia de Salta. En su paso por la feria contó que hay un fuerte fomento al diseño que ha crecido mucho en los últimos cinco años. “Tenemos unos 100 diseñadores que trabajan de la mano de nuestros artesanos, haciendo de sus saberes y las materias primas más autóctonas productos con diseño moderno, muy valorado por los consumidores y la moda actual”, expresó.

Una de las exponentes de esta tendencia es la diseñadora Roxana Liendro, hija de un conocido orfebre salteño, que desarrolló un estilo propio en lo que hace a accesorios, calzado e indumentaria a partir de la combinación de elementos típicos de su tierra como alpaca, plástico, lana y algodón, entre otros. Con la marca Santos Liendro, ella es una de las exponentes de la moda con identidad regional más reconocida en el país.

“Hace un año quedé en el séptimo puesto de la Fashion Week en Londres por mis diseños en indumentaria y accesorios. En septiembre viajo a Tokio como representante del noroeste argentino, junto a otros 12 diseñadores de indumentaria”, cuenta Roxana, que debuta en Caminos y Sabores y en su primer día vendió todas las prendas que había traído. Ella es una de los cinco diseñadores de indumentaria que participan de la feria. Que exhiben sus productos junto a artesanos y cooperativas que también forma parte del sector salteño en el camino de lo tradición.

Pero Salta está presente en varios caminos de la feria y eso habla de la multiplicidad de propuestas que tienen sus productores. Ramos Mejía cuenta que abundan los pequeños productores, con muchas dificultades para alcanzar una producción en escala, con ellos es con quienes la provincia trabaja más cercanamente. “En ferias como ésta es donde nuestros productos se comercializan conservando la calidad original”, dice Ramos Mejía. “Aquí no hay intermediarios, entonces los consumidores tienen la posibilidad de acceder a las materias primas más genuinas. Hay una gran diferencia entre el pimentón salteño que se compra en Caminos y Sabores y el que se puede adquirir muchas veces en el mercado, que es mezclado por la cadena de distribución con otros de menor calidad”, ejemplifica el funcionario, develando así uno de los secretos que encierra el éxito de esta feria de la cultura de nuestros sabores y nuestra identidad.

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